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Crónica de Justin Leov - EWS Millau




¡ Creo que podría ser el año de todas las carreras en mojado en la EWS!



Texto: Justin Leov






Llegando al sur de Francia esperábamos llegar al verano y a los senderos polvorientos, la madre naturaleza tenía  otros planes para nosotros!

 

Millau sería una mezcla de senderos rocosos muy empinados con las curvas típicas en las que necesitas pilotar en invertido. Ves muchos de estos en el sur de Francia. Etapas físicas y enlaces físicos también entrarían en el menú. Sería otra super batalla tanto para el cuerpo como para la bici. Con la lluvia cayendo nos íbamos a enfrentar a barro, viento y frío, todo mezclado en una  gran lavadora durante una semana.

  

Empezando con los entrenamientos me sentí confiado en los senderos. Sin embargo me di cuenta de que tan pronto la lluvia llegó ésta iba a ser una carrera en la que iba a lidiar con problemas y había muchas cosas que podían pasarle a la bicicleta o con accidentes que podrían afectar el resultado. Algunas pequeñas caídas en el entrenamiento que surgían de la nada reforzaron mis pensamientos sobre todo esto.





En el primer día ya veíamos un comienzo resbaladizo; La primera especial del día tenía un poco de todo, pero en las secciones empinadas necesitaba mucho cuidado para permanecer en la bici a la velocidad de carrera. Aproximadamente a medio camino en esta especial me enganché con una roca en mi pedal y no estoy seguro si fue mi pie o una roca pero algo rozó mi guía-cadenas sacándolo del cuadro. Miré hacia abajo con horror para ver la cadena y el daño. Tener que correr las pequeñas secciones de subida de esta especial que acababa de empezar y empezar a  pensar que mi fin de semana había terminado fue todo uno.

  

Al terminar esa especial pude quitar el guía roto y continuar encima a la etapa 2. Sin el guía tenía dudas como sería de la  bajada ya que era realmente bacheada,rápida y tenía una larga subida a mitad de especial. Desafortunadamente se me salio la cadena perdí mucho tiempo volviéndola a poner en su sitio. Terminé la especial y supe que necesitaba llegar a la zona técnica  lo antes posible para ver lo que Larry, mi mecánico podría hacer para arreglar el problema.

 

Como había dañado el cuadro, Larry se le ocurrió una solución, que constaba de tres bridas y un pequeño anillo de metal por el que pasaba la cadena. A pesar de que ahora el pedaleo era muy ruidoso era nuestra mejor solución .






En la especial 3 mi cadena funcionaba y era capaz de pasar a través de la especial 4 sin que se saliese. Dirigiéndonos a la especial final del día éste había sido una batalla mental y física y nadie sabía realmente a qué hora debíamos estar en la cima. Llegamos helados y mojados y los jueces nos dijeron que teníamos que esperar 30 minutos más, hubo algunas discusiones ya que todos queríamos salir ya a nadie le gusta estar bajo la lluvia sin refugio después de 6 horas pedaleando bajo ella. Esta especial fue la mejor del día ya que la lluvia caía con fuerza y limpio el exceso de barro.



 




 

Día dos ¡De nuevo lluvia!




Larry había hecho un trabajo realmente bueno en la instalación de un guía-cadena para el segundo día y ya no tendría que preocuparme por la cadena. Veríamos niebla y lluvia en las dos primeras especiales y mucho más barro para lidiar en el día de hoy.





El enlace a la especial 8 fue todo el camino por barro que cambió de estar mojado a convertirse en un pantano. Al entrar en la especial 8 me sentí muy bien y me gustó la especial. Sin embargo, no presté atención a una raíz perdiendo el grip en mi rueda delantera en una sección muy escarpada y me estampé de morros antes de que yo pudiera incluso soltar las manos del manillar. Me levanté lo más rápido que pude, enderecé mi manillar e hice el resto de la especial muy bien.



Última especial del día y esta vez fue un paseo relajado las condiciones de la  pista estaban mucho mejor y no tuve problemas mecánicos esto me hizo tener una sensación buena al cruzar la línea de meta.

Terminé esta carrera difícil en el puesto 50 que aunque no es tan bueno, acabar una EWS tan pasada por agua es ya toda una victoria.


 

¡Nos vemos en la próxima cita en Colorado!

 

Justin Leov