La industria eMTB no ha tardado en prender fuego al debate: Bosch, uno de los gigantes del sector, ha sido acusado de maniobras proteccionistas tras su implicación en las recomendaciones regulatorias propuestas por la asociación alemana ZIV. Bosch es acusado de querer proteger su trono impulsando medidas a la carta que limite la innovación de sus rivales.
La propuesta que ha causado revuelo en la industria del eMTB: limitar la asistencia eléctrica a 750W y establecer una relación máxima de ayuda de 1:4 entre ciclista y motor. Sobre el papel, una manera de mantener la esencia “bike” en la e-bike. En la práctica, un corsé técnico que muchos ven como una jugada táctica para blindar la posición de quienes hoy dominan el mercado.
Hannes Neupert, veterano en movilidad eléctrica y conocido por no morderse la lengua, lo tiene claro: “Bosch está usando toda su fuerza para frenar la innovación. Se han quedado atrás y ahora intentan que los demás tampoco avancen”. Palabras mayores.
La jugada de Bosch: ¿torpeza o táctica?
En mayo de 2025, Bosch actualizó su motor Performance CX Gen 5 con una cifra mágica: 750W de potencia pico. Curioso, considerando que un año antes había abogado por limitar esa misma cifra. ¿Cambio de opinión o movimiento para asegurarse de que, si subimos el listón, nadie lo hace más alto que ellos?.
Desde Bosch se defienden. Claus Fleischer, CEO de Bosch eBike Systems, afirma que han participado en los grupos de trabajo como cualquier otra empresa miembro de ZIV. Pero la sombra de la influencia es alargada, y el hecho de que otras empresas dentro de ZIV no apoyen la propuesta no hace sino alimentar la sospecha.
Annick Roetynck, de la asociación LEVA-EU, no es menos contundente: “Estoy asombrada. Esto es proteccionismo, puro y duro. Se intenta frenar cualquier cosa que represente competencia para las e-bikes convencionales”.
La comunidad eMTB no ha tardado en reaccionar. Los riders, desarrolladores y nuevas marcas quieren espacio para innovar, explorar nuevos formatos, integrar sistemas de seguridad como ABS o regeneración de energía, y adaptarse a un público cada vez más diverso. Limitar sin flexibilidad es frenar. Y en una industria que avanza a golpe de evolución técnica y nuevos usos, eso equivale a pedalear cuesta arriba… sin asistencia.
Permítanme decir que Bosch tiene como objetivo proteger su posición comercial aquí. Se ha quedado atrás en la innovación de los motores de bicicletas eléctricas y está utilizando toda su potencia para tratar de ralentizar o evitar que otros ganen cuota de mercado a expensas de Bosch", dijo Neupert a BikeBiz.
¿Qué va a pasar?
La propuesta del ZIV ya fue rechazada por los miembros de LEVA-EU que también forman parte de la asociación alemana, y que no están de acuerdo con las restricciones planteadas. Aun así, el grupo de trabajo del ZIV intentó en noviembre del año pasado que la normativa fuera aprobada por el comité de la UE encargado de los EAPC (ciclos de pedaleo asistido eléctricamente), pero no consiguió la mayoría de votos necesaria, por lo que todo sigue aún en el aire.
Cabe señalar que la propuesta del ZIV fue acordada hace ya un año y medio por sus 140 miembros donde la mayoría de los votos fueron a favor de la normativa, y desde entonces siguen presionando para imponer las limitaciones de potencia que interesan a ciertos socios clave. Recordemos que, además de Bosch, en el ZIV también están presentes otros fabricantes de motores como Yamaha, Brose o TQ, así como marcas de bicicletas como Cannondale, KTM o Canyon.
