Las roldanas del cambio trasero de nuestras bicicletas son tal vez una de las piezas más olvidadas y a la que menos mantenimiento les hacemos, a pesar de ellas son las encargadas de mover la cadena.
Las roldanas de mountain bike han cobrado un mayor protagonismo con la llegada de los cambios de 12 velocidades aumentando su tamaño y sus dientes para poder mover la cadena en unos cassettes con unos rangos tan amplios de desarrollo.
Normalmente de casa las roldanas que trae un cambio trasero suelen ser de plástico y con una superficie sin orificios, uno de los problemas que más se genera en estos componentes es la acumulación de suciedad encima de ellas que termina siendo una especie de pasta que no las deja mover bien y luego a medio plazo un desgaste de los dientes de plástico que la componen.
Limpieza
Una vez a la semana hay que hacer una limpieza de las roldanas, para ello puedes usar un cepillo de dientes viejo o un destornillador fino para desprender la capa de suciedad que estará pegada en su superficie, para terminar usa un trapo y comprueba que la roldana gira perfectamente.
Lubricantes
Hay que que tener mucho cuidado con los lubricantes que usamos en nuestra cadena, ellos pueden hacer que las roldanas se ensucien más deprisa de lo normal. Las ceras si no se disuelven bien y se quita el exceso una vez aplicadas en la cadena, acabarán “atorando” las roldanas, creando un capa mugrosa alrededor de ellas.
Lo mismo pasa con los lubricantes demasiado “aceitosos”, provocarán que las roldanas atrapen todo el polvo y tierra del camino, fíjate en los lubricantes que apenas machen y quita siempre el exceso pasando un trapo por la cadena.
Roldanas de aluminio.
Una gran mejora que le puedes hacer a tu cambio es montarle unas roldanas de aluminio , su superficie está agujereada lo que hace que sea más difícil que la suciedad se pegue a ellas, por otra parte sus dientes son mas resistentes y sufren un desgaste mucho menor a la par que ayudan a pasar a la cadena mejor.
Lleves las roldanas originales del cambio o decidas sustituirlas por otras mejores, nunca tendremos que olvidarnos de realizar su mantenimiento semanal para evitar que la suciedad se vaya acumulando en ellas y conseguir que esta pequeña pieza tan importante siga haciendo que toda nuestra transmisión funcione de manera suave y correcta durante nuestras rutas en mountain bike.