El gravel ha heredado lo mejor del MTB y de la carretera, pero hay un detalle que sigue generando debate: ¿Qué ancho de neumáticos montar?. Si bien muchos siguen fieles a los 38–47 mm, cada vez más ciclistas de gravel (sobre todo en carreras y rutas exigentes) se pasan a las cubiertas anchas de MTB. ¿La razón? En una frase: el neumático más rápido es el que no se pincha, te proporciona seguridad y comodidad.

Ventajas de usar cubiertas de MTB en una bicicleta Gravel
Más aire, más protección
Una cubierta de MTB mete mucho más aire entre el ciclista y el terreno. Eso se traduce en una mejor absorción de impactos y menos riesgo de llantazo frente a raíces, rocas o surcos ocultos bajo el polvo del pelotón, este aire extra va a venir muy bien cuando bajando en pelotón te encuentres pistas con piedras sueltas y roderas.
Adiós a los pinchazos tontos
Cuando ruedas en mitad de un grupo, sin ver la trazada y con polvo por todas partes, un neumático estrecho es carne de pinchazo. Una cubierta más ancha te da ese margen extra para sobrevivir al caos de las salidas sin perder la carrera antes de empezar, una cubierta de MTB es mucho mas resistente a los objetos punzantes que hay en las pistas y te permitirá cometer fallos.
Gravel del ciclista profesional Ibai Fradeja
Más confianza, menos tensión
Rodar con cubiertas de MTB en gravel significa que puedes dejar de esquivar todo o que una piedra del tamaño de una canica te tire al suelo y simplemente fluir. Al tener más balón, las ruedas se comen piedras, ramas y baches sin que tengas que pelear cada línea. Resultado: menos tensión, más control y menos desgaste físico en los brazos.
Velocidad real, no de catálogo
Sí, es cierto que un neumático más estrecho tiene menos resistencia a la rodadura en una pista idílica totalmente limpia y lisa. Pero en la vida real, cuando hay baches, polvo y terreno roto, la velocidad extra la da la capacidad de mantener el ritmo sin caídas de tracción o golpes secos. Un neumático de MTB te va a permitir rodar sin miedo y sin necesidad de frenar para esquivar cosas.
Más diversión
Porque seamos sinceros: una bicicleta gravel con cubiertas anchas se siente más segura, más polivalente y más divertida. Y al final, de eso va todo esto: de disfrutar, no de pelearte con cada piedra del camino. Muchos ciclistas prueban el gravel y salen despavoridos al ver la falta de control debido a esas cubiertas finas en las bajadas rápidas por pistas.

Hoy en día, muchos cuadros gravel ya admiten cubiertas de hasta 50 mm o directamente estamos viendo a muchos corredores de gravel usar cuadros de MTB con manillar curvo lo que permite usar el ancho de las cubiertas mtb . ¿Estamos ante la “MTB-ización” definitiva del gravel? Puede que sí. Pero una cosa es segura: más ancho = más flow, mas seguridad y más diversión.