La electrónica en el mountain bike ya está aquí, ahora el tiempo dirá si se queda con nosotros o pasa al olvido del museo de la bicicleta de montaña.
Rockshox flight attendant y mando AXS
Los fabricantes han iniciado una carrera para “electrificar” algunos de los componentes que visten a la bicicleta. Sin duda las transmisiones de MTB electrónicas son las piezas más avanzadas en esta carrera, tanto es así que incluso hay un intento de abaratar esta tecnología para llegar a todo el mudo, como es el caso del grupo Sram GX AXS
¿Qué tiene que pasar para que la electrónica triunfe en el MTB?
La electrónica tiene varios muros que derribar antes de convertirse en algo normal en nuestras bicicletas, el primero es demostrar su durabilidad, su bajo mantenimiento y su eficiencia en funcionamiento, ya que ningún ciclista le gustaría llevar algo que no pare de darle problemas o puede dejarlo tirado en mitad de la montaña, el segundo muro y tal vez el más importante es conseguir abaratar su producción y acercarse al precio de los componentes “normales”, este paso suele ocurrir cuando su fabricación aumente y por ende se abarate.
"Para terminar se necesita llegar a un nivel de uso sencillo, uno de los handicaps actuales es el tener que cargar sus baterías algo tedioso si llevamos diferentes componentes electrónicos, un futuro de cargas inalámbricas dejando la bicicleta sobre una plataforma de carga puede solucionar este problema."
Canyon Spectral con transmisión y suspensiones electrónicas.
¿Qué ventajas tiene la electrónica en la bicicleta?
Todos sabemos que un cable hace perfectamente la función de mover el desviador trasero, un cambio electrónico la ventaja que te da es la de eliminar un cable del cuadro y por lo tanto es estética, también hay sumarle que es más suave apretar un botón electrónico que empujar una palanca, pero si viajas mucho sabes que un cambio mecánico siempre será más fácil de reparar en una tienda que uno electrónico. Al final es más una decisión personal del ciclista que una mejora tangible.
El otro nuevo frente electrónico son las suspensiones, que automáticamente se van regulando según las necesidades del terreno. ¿Son necesarias?, si te estás jugando la World Cup posiblemente llevar la suspensión con la regulación perfecta en cada metro del sendero te dará una pequeña ventaja que te puede llevar a ganar, pero si estas con tu grupeta ciclista montando un domingo realmente te daría igual, de nuevo volvemos a la casilla que será una decisión final del ciclista el usarlas, más que una mejora tangible.
Al final la integración de los componentes eléctricos dependerá en gran medida en su abaratamiento, si hubiese un grupo barato electrónico todo el mundo se lo pondría y si las suspensiones electrónicas para mountain bike tuvieran el mismo precio que una normal no existiría ni este debate.
Las ventajas de usar estos componentes a día de hoy son la comodidad de no tener que montar cables a la hora de los montajes de transmisiones, además de la estética limpia que gana la bicicleta y en el caso de las suspensiones, el tener que olvidarte de estar regulando la suspensión durante la ruta, ya que ella sola irá adaptándose al terreno que vayas rodando. Dentro de las desventajas a día de hoy estaría el precio, la carga de las baterías además de la reparación/sustitución en caso de avería. ¿Te ves dentro de 5 años usando componentes electrónicos en tu bicicleta?.